Roberto Bolaño, escribe en Entre paréntesis sobre el que fue su gran amigo, el poeta Mario Santiago, inspirador del inmortal Ulises Lima.
“No creía en países y las únicas fronteras que respetaba eran las fronteras de los sueños, las fronteras temblorosas del amor y del desamor, las fronteras del valor y del miedo, las fronteras doradas de la ética.
Para el escritor de verdad, su única patria es su biblioteca, una biblioteca que puede estar en estanterías o dentro de su memoria”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario