sábado, 8 de enero de 2022

"Lágrimas en la lluvia", de Rosa Montero


He leído pocos libros de ciencia ficción, sin embargo he visto unas cuantas películas. Para mí es un género más cinematográfico que literario. El cine ha dejado momentos inolvidables, como el mítico final de Blade Runner con el memorable parlamento en el que replicante protagonista se despide antes de morir. «“Yo he visto cosas que vosotros no creeríais. Atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto Rayos–C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tanhauser. Todos esos momentos se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia. Es hora de morir”. Y entonces inclinaba la cabeza y moría tan fácilmente. Tan fácilmente. Como un aparato eléctrico que alguien desenchufaba. Sin sufrir el tormento del TTT. Pero sus poderosas palabras reflejaban maravillosamente la inconsistencia de la vida… De esa sutil y hermosa nimiedad que el tiempo se deshacía sin dejar huella. Inclinaba la cabeza el rep de Blade Runner y moría, mientras la lluvia resbalaba por sus mejillas ocultando quizá sus últimas lágrimas» (p.241). El fragmento pertenece a la maravillosa novela Lágrimas en la lluvia de Rosa Montero, mi última lectura. 

Nunca es tarde si la dicha es buena. Mi descubrimiento de Rosa Montero tuvo lugar el pasado mes de diciembre cuando acudió a la Biblioteca Regional para hablar de sus libros de ciencia ficción. Fue un flechazo. Rosa Montero es inteligente, rapidísima, divertida, comprometida, vitalista, fascinante. Quedé rendido a sus pies. Me faltó tiempo para comenzar a leer la serie de la detective Bruna Husky. La primera se titula Lágrimas en la lluvia. En la charla contó que escribió su primera obra de ciencia ficción cuando tenía ocho años. Entre los cinco y los nueve estuvo enferma de tuberculosis y su tío le llevaba comics de Flash Gordon y de El príncipe valiente. Esas lecturas la llevaron a enamorarse de la ciencia ficción y del mundo artúrico: pasado y futuro sin solución de continuidad. Otro hito que marcaría su imaginario fue ver en vivo y en directo el Sputnik en el cielo de Madrid. Corría el mes de octubre de 1957 cuando por primera vez un ser humano salía de la atmósfera terrestre. Y ahí estaba la pequeña Rosa Montero mirando al cielo. En esos ojos estaba la semilla de Lágrimas en la lluvia.

El personaje de Bruna Husky es memorable. Dice la autora que es el que más se parece a ella en su manera de estar en el mundo. Fue el nombre que puso a su avatar en la desaparecida web Second Life, porque los huskys son sus perros favoritos, y Bruna se llamaba su perra. La historia de Lágrimas en la lluvia se sitúa a principios del siglo XXII reutilizando el mito de los replicantes de Philip K. Dick. Los tecnohumanos de Rosa Montero son clones exactamente humanos que tienen conciencia de la muerte y de la vida. Bruna Husky es una tecno que siempre está contando los días que le quedan de vida porque los tecnos tienen una peculiaridad insalvable: tan solo viven diez años. Está obsesionada con la muerte, lo que le permite tener conciencia de cada momento de la vida. Bruna es rápida como un lince y fría como el acero, una máquina perfecta para el combate en la que vamos vislumbrando una grieta por la que va a apareciendo su enorme humanidad. 

Madrid, año 2109. España es una región autónoma dentro de los Estados Unidos de la Tierra, un sistema liberal democrático unificado. Fuera de ella han surgido dos mundos artificiales, dos plataformas flotantes que orbitan en torno a la Tierra: Cosmos y Labari, con sistemas sociopolíticos totalitarios: el primero es un sistema comunista; el segundo una dictadura fundamentalista religiosa. En este contexto se sitúan la aventuras de la detective Bruna Husky, que está acompañada de unos secundarios de lujo: El viejo humano Yiannis, archivero de los Archivos Centrales de los EUT, una especie de Wikipedia única y oficial; Paul Lizard, policía rocoso con el que tendrá una relación especial;  Pablo Nopal, escritor encargado de crear la memoria de Bruna; Mirari, violinista experta en falsificaciones; Oli, la enorme dueña del bar al que es asidua Bruna y Yiannis; Maio, músico extraterrestre ultrasensorial refugiado en la Tierra. Bartolo, una mascota alienígena, mezcla de un perrito, peluche y un loro narizón. En los nombres del policía y del escritor se atisba el del periodista Pablo Lizcano, pareja durante muchos años de Rosa Montero y fallecido en 2009. A él está dedicado el libro. 

La trama gira en torno a una conspiración de un grupo supremacista de ultraderecha que pretende hacerse con el poder para acabar con los tecnohumanos. Bruna Husky, la Philip Marlow del siglo veintidós, tendrá que resolver este complicado rompecabezas. La ambientación futurista es más que verosímil, tanto que parece una novela realista del próximo milenio con tintes de novela negra. Es una novela con ritmo que en ningún momento pierde fuelle: tiene acción, humor, intriga y amor, en un trasfondo político perfectamente reconocible. Rosa Montero construye un mundo paralelo y coherente, un mundo realmente posible.

Termino de leer Lágrimas en la lluvia y seguidamente engancho con el segundo de la serie titulado El peso del corazón. Vuelvo a encontrar el famoso hilo de oro y no estoy dispuesto a soltarlo. Ese hilo se llama Rosa Montero.



                                                Iván Ferreiro. Promesas que no valen nada


8 comentarios:

  1. Es muy bueno ese monólogo de la película Blade Runner. No soy aficionada a la Ciencia Ficción (aunque cada vez le voy entrando más), pero esas palabras tan bonitas del replicante siempre me han parecido de lo mejor del cine.
    Leí Lágrimas en la lluvia hace ya diez años. y, en comparación con todo lo que había leído de Rosa Montero, no me gustó en exceso. Ahora que me voy quitando ese prejuicio hacia el género, intentaré releer ese y seguir con la serie.
    Un beso.

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    1. Hola Rosa, pues yo no había leído nada de Rosa Montero, salvo sus artículos de El País, y he comenzado a leerla con las aventuras de Bruna Husky. Me está encantando esta mezcla de realismo, novela negra y ciencia ficción. Es una autora que voy a seguir leyendo, sin duda. Ya me he hecho con varios libros suyos: "La Función Delta", "El corazón del tártaro" y "La ridícula idea de no volver a verte". Cuando termine la trilogía de Bruna leeré este último.
      Un beso.

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  2. Con Rosa Montero tengo una relación desigual. Me gusta mucho como articulista y como entrevistadora era lo más. No obstante, en algún escrito le he leído defensas de pseudociencias que me han espantado; la buena intención no basta y que las farmacéuticas sean "las malas" no convierte en "buena" cualquier alternativa.
    Respecto a los libros, he leído unos cuantos. Me gustan sin volverme loco. Me da la sensación de que le falta un punto de literatura. Pero seguramente es una cuestión de gustos. Mi preferido es "Te trataré como a una reina". Y respecto al que reseñas, me dejó completamente descolocado. Lo leí incluso con prejuicios, soy un bladerunneriano militante y me temía lo peor. Me equivoqué: el libro me encantó, muy especialmente el final. Descubrí otra Rosa Montero que no conocía y que me maravilló. Lo que no sabía es que se trata de una serie. Exploraré. Gracias.

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    1. La verdad es que no he seguido la polémica, pero me extraña, porque creo que Rosa Montero es defensora de la ciencia sin el pseudo, de hecho "La ridícula idea de no volver" a verte es un homenaje a Marie Curie.
      Me apunto "Te trataré como una reina" porque creo que le voy a dedicar un tiempo a Rosa Montero.
      Y efectivamante, hay dos más protagonizadas por Bruna Husky: "El peso del corazón", que la estoy leyendo y me está gustando tanto como la primera, y "Los tiempos del odio". En la charla dijo que estaba deseando escribir la cuarta para ver qué pasa con ese personaje que tanto tiene de ella.
      Gracias a ti por pasar por aquí.
      Un abrazo.

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  3. ¡Hola Juan Carlos!
    no me extraña que hayas disfrutado con esta novela, yo leí "La historia del rey transparente" también de ciencia ficción y me gustó mucho. De hecho Rosa Montero es de mis autoras preferidas.
    Por cierto, te echo de menos por mi blog, hace mucho que no me visitas y me encantaría volver a verte por allí algún día. Pero no pasa nada, supongo que los libros que suelo elegir y reseñar, no te atraen demasiado o no son de tu estilo y no quiero que te sientas obligado
    Besos

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    1. Hola Marian, me apunto la novela que mencionas. Descubrir a Rosa Montero a estas alturas es como no haber visto el sol todavía, pero a veces ocurre que no vemos lo que tenemos frente a nuestras narices, yo el primero.
      Es verdad que llevo tres meses con mucha racanería hacia mis blogs amigos (aunque no los he dejado de leer) y hacia el mío propio. Como propósito de año nuevo me he propuesto retomar costumbre de comentar las lecturas con más frecuencia. Por supuesto que me atraen muchos libros de los que reseñas. Me pasaré, no lo dudes.
      Un abrazo.

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  4. Pues me pasa igual, desde niño me ha cautivado el cine de ciencia-ficción, soy un gran fan, aunque venido a menos. Pero en literatura, es un género que no ha acabado de engancharme, con excepciones.
    Lo único que he leído de Rosa Montero es periodístico, el argumento de esta novela es muy sugerente aunque me temo que para 2109 no quedará de España ni la eñe, jaja.
    Espero que este 2022 haya comenzado con buen pie, un abrazo.

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    1. Jajaja, te recuerdo que el libro de Rosa Montero es ciencia ficción. Puede que de España no quede ni la eñe pero La Mancha no la borra ni una invasión de los fundamentalistas de Labari aliados con los comunistas de Cosmos. Con Don Quijote no hay quien pueda.
      El año ha comenzado con buen pie, pero con la que está cayendo es fácil torcerse el tobillo.
      Feliz año Gerardo, y un abrazo.

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